El uso de la electricidad como tratamiento de las enfermedades mentales se remonta a finales de los años 30,pero empezó de manera experimental.La historia concretamente se origina en que los psiquiatras de aquella época se percataron de que aquellos pacientes que padecían angustia severa se encontraban notablemente mejor despúes de sufrir una convulsión.
Entonces llegaron a la conclusión de que una descarga eléctrica haría un efecto similar al cerebro lo cuál produciría una respuesta orgánica similar, o eso era lo que esperaban.
En la década de los años 60,esta práctica ya era viable para un amplio número de enfermedades mentales,pero era más utilizada en concreto para la depresión severa.A pesar de esto,cuando se decidió cerrar por siempre los viejos psiquiátricos y se llevaron a juicio moral ciertas terapias agresivas como fue la lobotomía,lo mismo sucedió con el electroshock.
La llegada de fármacos antidepresivos entre los 70 y los 80 dió a los psiquiatras una alternativa a estas terapias que por aquel entonces ya se consideraban crueles y altamente agresivas para el ser humano,pero para pacientes en los que las otras terapias para el tratamiento de una depresión severa fallan,se continúa utilizando esta técnica aunque ya no esté tan generalizada como antes.A día de hoy se sigue utlizando en muchos países como Reino Unido.
La peligrosidad de esta técnica es muy alta,ya que recordemos,estamos aplicando descargas eléctrcias al órgano más sensible de nuestro cuerpo,el cerebro.Muchos médicos y psiquiatras opinan que los efectos negativos de esta práctica sobre el organismo vencen por mucho a los posibles beneficios que esta pueda aportar sin duda.Además hay evidencia científica de que realmente esta técnica no produce mejora sobre el paciente si no un efecto placebo,es decir,lo que realmente hace es crear una adicción a la práctica en los pacientes que asemeja su mejoría cuando no lo es.
Especialistas aseguran que dentro de unos años esta técnica al igual que la lobotomía dejará de utilizarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario