La ansiedad se define como aquel sentimiento desagradable de temor, que se percibe como una señal de peligro amenazante, en la que la amenaza con frecuencia es desconocida, característica que la distingue del miedo.
Actualmente se toman la ansiedad como la angustia como
sinónimos en la práctica clínica.
La ansiedad en si no se considera por si misma una
patología, ya que se encuentra contemplada en la amplia gama de respuestas
emocionales presentes en cualquier persona., cunado conserva cierta frecuencia,
intensidad, recurrencia y duración tiene una utilidad y un fin.
La OMS contempla los trastornos de ansiedad como un grupo de
trastornos dentro de la clasificación internacional de enfermedades mentales:
- Trastorno de ansiedad generalizada y agorafobia
- Crisis de pánico
- Fobia social
- Fobia específica
- Trastorno obsesivo compulsivo
- Trastorno de estrés postraumático
De todos estos la fobia social es el más común en la población
general y el abuso de alcohol y otras drogas contribuyen al inicio de las
crisis del pánico y de la agorafobia.
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| Fuente:desansiedad.com |
Cada uno de estos trastornos presentan etiología y sintomatología
común y específica,
En el trastorno de ansiedad generalizada (TAG), la persona a
menudo está preocupada o ansiosa respecto a muchas cosas y le parece difícil
controlar esa ansiedad.
Sus causas se desconocen, pero es posible que exista un
factor genético y que el estrés pueda contribuir a su aparición.
La presencia de un factor estresante genera un estrés pero
la ansiedad es el estrés que continua después de que el factor estresante haya
desaparecido. Es la resiliencia ( capacidad de soportar el estrés y recuperarse
del mismo) lo que hace que personas que viven en condiciones extremadamente
duras toleren la ansiedad mucho mejor que otras que no viven en esas
condiciones.
Cualquier persona, desde la infancia, puede sufrir este
trastorno, que se presenta con mayor frecuencia en mujeres.
El síntoma principal es la presencia frecuente de preocupación o tensión durante
al menos 6 meses, incluso cuando hay poca o ninguna causa clara.
La mayoría son conscientes de que sus preocupaciones o
miedos son mas fuertes de lo necesario, pero tienen dificultad para
controlarlos.
Otros síntomas son:
- Problemas de concentración
- Fatiga
- Irritabilidad
- Problemas para conciliar el sueño y/o permanecer dormido, e incluso que el sueño no llega a ser reparador ni satisfactorio.
- Inquietud al despertarse
- También se pueden incluir tensión muscular, problemas estomacales, sudoración o dificultad para respirar.
El tratamiento va dirigido a ayudarlo a sentirse mejor y
desempeñarse bien en la vida diaria, mediante psicoterapia (la más común y
eficaz es la terapia cognitiva conductista) y medicación (generalmente antidepresivos,
aunque también puede ser sedantes o hipnóticos) cuya función es la prevención de los síntomas o
haciéndolos menos intensos.
Aquellos pacientes diagnosticados de ansiedad generalizada
deben disminuir o eliminar estimulantes como la cafeína o no consumir drogas
y/o alcohol, además el realizar ejercicio físico, un buen descanso y consumo de
alimentos saludables ayudan a su mejoría.
Los grupos de apoyo para este tipo de patología también es
beneficiosa, dado que el compartir con personas que tengan experiencias y
problemas en común le ayudan a no sentirse solo, pero estos grupos no deben sustituir
la psicoterapia ni la medicación, sino ser una ayuda adicional.
El sistema nervioso simpático es el estimulado en este trastorno
por lo que habrá manifestaciones tales como:
- Aumento de frecuencia cardiaca
- Aumento de la presión arterial
- Pupilas dilatadas
- Piel fría
- Piloerección
- Disminución de la motilidad digestiva
- Niveles de ansiedad
Hildegard Peplau describió 4 grados de ansiedad en leve, moderada, intensa y angustia.
Cuidados de enfermería en salud mental.
Dado que la sintomatología de la ansiedad se asocia a muchos problemas fisiológicos y psicosociales diferentes como hipoglucemia, hipertiroidismo, asma, … es imprescindible realizar un diagnóstico de enfermería exacto para así poder planificar los cuidados de enfermería de una manera mas eficaz para cada pacientes con este trastorno.
En general, se intentará reducir la ansiedad mediante la eliminación de las creencias o conductas maladaptativas que contribuyen a mantener el estado de ansiedad patológica.
Ayudar a los pacientes a modificar patrones de conducta que les impide superar sus miedos, ayudándole a identificar los pensamientos erróneos/negativos que inician su ansiedad.
Ayudar al paciente a modificar la reacción conductual a las situaciones que provocan la ansiedad, pudiendo utilizar métodos de relajación o de respiración profunda interrumpiendo así las respuestas automáticas de la ansiedad.
Debemos tener presente que un profesional tranquilo y confiado tiene mucha eficacia terapéutica en los pacientes ansiosos. Pero también es posible que estos pacientes provoquen frustración en los profesionales de enfermería, esto se podría prevenir si desarrollan introspección sobre como reaccionan a la conducta de los pacientes.
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